sábado, 31 de agosto de 2013

¡DESPIERTA! - ¡LA FELICIDAD ERES TÚ!


Extracto del libro Autoliberación Interior 

de Anthony de Mello




Despertarse es la espiritualidad, porque sólo despiertos podemos entrar en la verdad y descubrir qué lazos nos impide la libertad. Esto es la iluminación. Es como la salida del Sol sobre la noche, de la luz sobre la oscuridad. Es la alegría que se descubre a sí misma, desnuda de toda forma. Esto es la iluminación. El místico es el hombre iluminado, el que todo lo ve con claridad, porque está despierto.

No quiero que crean lo que digo porque yo lo digo, sino que cuestionen cada palabra y analicen su significado y lo que él le dice en su propia vida personal dice en vuestra vida personal; pero con sinceridad, sin autoengañaros por comodidad o por miedos.

Lo importante es el Evangelio, no la persona que lo predica ni sus formas. No la interpretación que se le ha dado siempre o la que le da éste o aquél, por muy canonizado que esté. Eres tú el que tiene que interpretar el mensaje personal que encierra para ti, en el ahora. No te importe lo que la religión o la sociedad prediquen.

La sociedad sólo canoniza a los que se conforman con ella. En el tiempo de Jesús y ahora. A Jesús no pudieron canonizarlo y por ello lo asesinaron. ¿Quiénes creéis que lo mataron? ¿Los malos? No. A Jesús lo asesinaron los buenos de turno, los más respetados y creídos en aquella sociedad.


A Jesús lo mataron los escribas, los fariseos y sacerdotes; y si no andas con cuidado, asesinarás a Jesús mientras vives dormido.

“Despertarse es la espiritualidad, porque sólo despiertos podemos entrar en la verdad y la libertad”


jueves, 29 de agosto de 2013

ANÉCDOTA....

Un paciente fue a la consulta del queridísimo Dr.Hugo Spañol.

Le dice..... Me siento muy mal....-"siento que lo que hago no le agrada a nadie", continuó diciendo....."No puedo complacer a todos"

El Dr. Hugo Spañol, con lentitud y firmeza, toma un papel y una lapicera y le escribe el siguiente texto....

"CUANDO ACTÚE, PROCURE HACERLO PARA SATISFACERSE A SÍ MISMO, NO PARA COMPLACER A OTRO.
CON EL OTRO ESTARÁ UN RATO; CON USTED TODA LA VIDA.

Este es un hecho verídico. Tengo el papel en el cual le escribió ese mensaje a esta sensible y hermosa persona, cuyo nombre resguardo.

Disfrutenló, piensenló.

miércoles, 28 de agosto de 2013

REFLEXIÓN!

Antes de incorporar más temas......sugiero que se "amiguen" con el espacio..... puedan leer y disfrutar de los diferentes escritos..... y si tienen ganas pueden y me gustaría su participación! Saludos a todos!! y Gracias!

SOLICITUD:

Hola a todos, quiero pedirles a los que no lo han hecho, si es que lo desean, hacerse "miembro" del blog. Es un par de pasos, no es tan complicado. Cualquier duda me consultan

drgermank@gmail.com

martes, 27 de agosto de 2013

EL CIRCO DE LA MARIPOSA - CORTOMETRAJE -


Jorge Drexler - Todo se transforma (video clip)


LÍMITES SANADORES - ANSELM GRUM





En el acompañamiento nos confrontamos una y otra vez al tema del límite. Entre las personas que buscan ayuda, existen muchas que padecen por no poder establecer límites. Ellas no pueden decir no, sino que se encuentran bajo la presión inte­rior de satisfacer todos los deseos que les formulen. Piensan que deberían corresponder a todas las expectativas posibles de los demás. Tienen miedo de decir no, porque temen ya no sen­tirse pertenecientes, o porque creen que experimentarán re­chazo si se rehúsan a algo. Otras comen sin medida: no perci­ben su propio límite. Y padecen por no poder ponerse límites.

Otras, a su vez, han perdido la capacidad de delimitarse frente a las personas de su entorno. Sus límites se deshacen. De inme­diato perciben lo que sienten los demás. Pero no es positivo, de ninguna manera, ya que sus propios sentimientos se confun­den constantemente con los de los demás. Están expuestas a los estados de ánimo del entorno y permiten que éstos las deter­minen. A veces tienen incluso la impresión de que se desinte­gran. Viven desprotegidas. Quien analiza las historias de vida de estas personas, notará pronto que las causas de ello con fre­cuencia se remontan muy atrás. Las personas sin límites gene­ralmente han sufrido en la infancia la falta de respeto de sus límites. Tales experiencias lastiman a las personas afectadas. No sólo duelen, muchas veces también tienen consecuencias pro­blemáticas y efectos posteriores duraderos: todos necesitamos nuestro marco de protección. Un ejemplo es la madre que, sin golpear la puerta, ingresó al cuarto de su hija, en su ausencia buscó en los cajones o leyó su diario. Una y otra vez se da este caso: quien sufrió en la infancia tales lesiones a sus límites, a menudo tiene dificultades en sus relaciones durante toda su vida. Los ejemplos pueden continuarse. Todos muestran que nuestra vida únicamente puede resultar exitosa si la vivimos dentro de determinados límites.

¿Pero cómo resulta la vida de una persona, que siempre es una vida de relación? Sin la capacidad de delimitarse no es po­sible percibir la propia persona y desarrollar su personalidad. La simple mirada al sentido de la palabra lo indica: “persona” significó primitivamente “máscara”; esto es algo que sostengo frente a mí. Puedo tomar contacto con el otro a través de la máscara. El vocablo en latín personare, significa “sonar fuerte”. A través de mi voz, de mi habla, llego a la otra persona, y de este modo se produce el encuentro. Para que el encuentro re­sulte es necesario un buen equilibrio entre límite y violación del límite, protección y apertura, delimitación y entrega de sí mismo. Debo conocer mi límite. Recién entonces podré tras­pasarlo para acercarme al otro y encontrarlo, para palparlo en el encuentro y, probablemente, experimentar un momento de llegar a ser uno.

sábado, 24 de agosto de 2013

LA AMISTAD - HUGO SPAÑOL

(Dr. Hugo O. Spañol, del libro "La enfermedad Emocional")


Los vínculos afectivos se darán por una respuesta inicial instintiva, y se irán fortaleciendo a medida que aparezcan las coincidencias morales, ideológicas, culturales, deportivas, expansivas, etcétera. Cuantas mayores coincidencias se establezcan, más fácil resultará ocupar tiempo en esa relación, favoreciendo su desarrollo. Sin embargo, una amistad es una relación más profunda, y por ese motivo no resulta tan plural.

Frecuentemente se involucra en el concepto de amistad, vínculos tales como compañeros, camaradas, cómplices, compinches, colegas, correligionarios, etcétera.

Pero la amistad, a diferencia de otras relaciones, es un vínculo parejo que se establece entre dos “virtuosos”. La “virtud” de cada uno, será esa condición genética que le permita “admirar” al otro y a través de una actitud recíproca, establecer el sólido vínculo de la amistad. No es infrecuente en otras relaciones, reemplazar la admiración por la envidia, Y eso puede ocurrir en alguna de las partes. El que admira elogia, el que envidia critica negativamente; El que admira construye, el que envidia destruye; el que admira, desea que el otro aumente sus potenciales; el que envidia, pretende lograr los potenciales del otro. Esto ocurre porque el que admira “ama” (esa es la virtud), y el que envidia “quiere”.

Si observamos el comportamiento de los niños, notaremos que en algunos, ya se perfila ese sentimiento, resultando difícil el cambio, debido a que el condicionamiento (sobretodo social), estimula a querer, a poseer y no a dar.

La amistad, como todo vínculo parejo, está integrada por dos partes que brindan comprensión, consideración, admiración y protección en forma proporcional. Es factible encontrar casos en que  un solo integrante posee estas capacidades y la relación funciona de todos modos, esto se debe a que hay uno que aporta y otro que recibe; el inconveniente se plantea cuando debe darse la relación inversa. Estos casos no son normales, pero son comunes. Las otras relaciones no son incorrectas, pero no deberíamos denominarlas “amistad”.  Estos vínculos necesitan un entorno o contexto (un barrio, un colegio, un club, una fábrica, una institución, etcétera), lugares donde se formarán grupos con algunas afinidades permitiendo tener buenos, regulares o malos compañeros, colegas, correligionarios, etcétera. En cambio la amistad no necesita decorado porque se da desde el interior de cada uno.

Para elegir un amigo, primero hay que poder serlo y luego darse la circunstancia del encuentro.  



TEXTO DE VERENA KAST

(Una de las psicoanalistas Junguianas que más libros ha escrito sobre los cuentos de hadas y su interpretación desde la teoría de C.G. Jung).


"Si seguimos subiendo la piedra con esa actitud juvenil que la sociedad espera de nosotros y premia, quizá nos preguntemos si esto es todo lo que la vida nos ofrece. A medida que nos vamos cansando con más facilidad, podemos preguntarnos con desesperación si éste es realmente el significado de la vida, si esto es todo lo que hay. [...]

Sísifo tenía que subir su pedrusco. Pero nosotros, los humanos, incluso aquellos que somos seguidores de Sísifo, podemos decidir si queremos seguir empujando el pedrusco o no. Porque podría ser el momento de abandonar la piedra cerca de la cima, de renunciar a la experiencia del esfuerzo heroico que hemos hecho a diario, para tomarnos un respiro y permitir que cobren vida otros aspectos de nuestro ser.


E incluso si decidimos seguir subiendo la piedra, tenemos la opción de hacerlo con una actitud diferente. En lugar de esforzarnos compulsivamente para conseguir alcanzar un objetivo único, podríamos elegir cuándo, al servicio de qué idea, y con qué actitud queremos empujar cada piedra que nos encontremos.
Puede que sea el momento de soltar la piedra para siempre y hacer algo diferente, algo que tenga sentido para nosotros en lo que nos quede de vida. Las dos son elecciones difíciles."

lunes, 19 de agosto de 2013

3° TEMA A COMPARTIR

EL VALIOSO TIEMPO DE LOS MADUROS.
(Mario de Andrade) (Poeta, novelista, ensayista y músico brasileño)

“...Conté mis años y descubrí, que tengo menos tiempo para vivir de aquí en adelante, que el que viví hasta ahora...

Me siento como aquel chico que ganó un paquete de golosinas: las primeras las comió con agrado, pero, cuando percibió que quedaban pocas, comenzó a saborearlas profundamente.

Ya no tengo tiempo para reuniones interminables, donde se discuten estatutos, normas, procedimientos y reglamentos internos, sabiendo que no se va a lograr nada. Ya no tengo tiempo para soportar absurdas personas que, a pesar de su edad cronológica, no han crecido. Ya no tengo tiempo para lidiar con mediocridades.

No quiero estar en reuniones donde desfilan egos inflados. No tolero a maniobreros y ventajeros. Me molestan los envidiosos, que tratan de desacreditar a los más capaces, para apropiarse de sus lugares, talentos y logros. Detesto, si soy testigo, de los defectos que genera la lucha por un majestuoso cargo. Las personas no discuten contenidos, apenas los títulos. Mi tiempo es escaso como para discutir títulos. Quiero la esencia, mi alma tiene prisa........ 

Sin muchas golosinas en el paquete... 

Quiero vivir al lado de gente humana, muy humana. Que sepa reír, de sus errores. Que no se envanezca, con sus triunfos. Que no se considere electa, antes de hora. Que no huya, de sus responsabilidades. Que defienda, la dignidad humana. Y que desee tan sólo andar del lado de la verdad y la honradez. Lo esencial es lo que hace que la vida valga la pena. Quiero rodearme de gente, que sepa tocar el corazón de las personas….

Gente a quien los golpes duros de la vida, le enseñó a crecer con toques suaves en el alma. 

Sí…. tengo prisa… por vivir con la intensidad, que solo la madurez puede dar. Pretendo no desperdiciar parte alguna, de las golosinas que me quedan… Estoy seguro que serán más exquisitas, que las que hasta ahora he comido.

lunes, 12 de agosto de 2013

SALUDO - PRESENTACIÓN

Hola! Los invito a participar de éste Blog, espero que todos juntos encontremos un sitio, dónde poder compartir inquietudes, reflexiones, puntos de vistas, pensamientos, etc.

Les propongo que a medida que ingresen se vayan presentando, así nos vamos conociendo entre todos. No hay exigencias de ningún tipo, sólo lo que ustedes deseen poner. Su nombre real o de fantasía, y lo que crean importante contar.

Un saludo a todos ustedes!!!!

sábado, 10 de agosto de 2013

2° TEMA A COMPARTIR:

LO PEOR ES EL VÉRTIGO

(Extractado del libro "La resistencia" de Ernesto Sábato)

En el vértigo no se dan frutos ni se florece. Lo propio del vértigo es el miedo, el hombre adquiere un comportamiento de autómata, ya no es responsable, ya no es libre, ni reconoce a los demás.

Se me encoge el alma al ver a la humanidad en este vertiginoso tren en que nos desplazamos, ignorantes, atemorizados sin conocer la bandera de esta lucha, sin haberla elegido.

El clima de Buenos Aires ha cambiado. En las calles, hombres y mujeres apresurados avanzan sin mirarse, pendientes de cumplir con horarios que hacen peligrar su humanidad. Ya sin lugar para aquellas charlas de café que fueron un rasgo distintivo de esta ciudad, cuando la ferocidad y la violencia no la habían convertido en una megalópolis enloquecida.

Cuando todavía las madres podían llevar a sus hijos a las plazas, o visitar a sus mayores.

¿Se puede florecer a esta velocidad?

Una de las metas de esta carrera parece ser la productividad, pero ¿acaso son estos productos verdaderos frutos?

El hombre no puede mantenerse humano a esta velocidad, si vive como autómata será aniquilado. La serenidad, una cierta lentitud, es tan inseparable de la vida del hombre como el suceder de las estaciones lo es de las plantas, o del nacimiento de los niños.

Estamos en camino pero no caminando, estamos encima de un vehículo sobre el que nos movemos sin parar; como una gran planchada, o como esas ciudades satélites que dicen que habrá.

Ya nada anda a paso de hombre, ¿acaso alguno de nosotros camina lentamente?

Pero el vértigo no está solo afuera, lo hemos asimilado a la mente que no para de emitir imágenes, como si ella también hiciese zapping; y, quizás, la aceleración haya llegado al corazón que ya late en clave de urgencia para que todo pase rápido y no permanezca. Este común destino es la gran oportunidad, pero ¿quién se atreve a saltar afuera?

Tampoco sabemos ya rezar porque hemos perdido el silencio y también el grito. En el vértigo todo es temible y desaparece el diálogo entre las personas.

Lo que nos decimos son mas cifras que palabras, contiene más información que novedad. La pérdida del diálogo ahoga el compromiso que nace entre las personas y que puede hacer del
propio miedo un dinamismo que lo venza y les otorgue una mayor libertad.

Pero el grave problema es que en esta civilización enferma no sólo hay explotación y miseria, sino que hay una correlativa miseria espiritual.

La gran mayoría no quiere la libertad, la teme. El miedo es un síntoma de nuestro tiempo.

Al extremo que, si rascamos un poco la superficie, podremos comprobar el pánico que subyace en la gente que vive tras las exigencias del trabajo en las grandes ciudades.


Es tal la exigencia que se vive automáticamente, sin que un sí o un no haya precedido a los actos.

domingo, 4 de agosto de 2013

1° TEMA A COMPARTIR

Extracto de la introducción del libro “La libertad, primera y última” de Jiddu Krishnamurti

Comunicarnos unos con otros, aun conociéndonos bien, es en extremo difícil. Podré usar palabras que para vosotros tengan diferente sentido que para mí.

La comprensión sólo llega cuando nosotros ‑vosotros y yo- nos encontramos en el mismo nivel al mismo tiempo. Ello ocurre tan sólo cuando existe verdadero afecto entre las personas; entre marido y mujer, entre amigos íntimos. Esa es la verdadera comunión. El entendimiento instantáneo adviene cuando nos encontramos en el mismo nivel al mismo tiempo.

Resulta muy arduo establecer contacto unos con otros en forma fácil, eficaz y con efectos definitivos. Yo empleo palabras que son muy sencillas, que no son técnicas, porque no creo que ningún tipo técnico de expresión vaya a ayudarnos a resolver nuestros difíciles problemas. Desearía transmitir, con las palabras muy sencillas de que nos valemos en nuestra vida diaria, algo de significación más profunda; pero ello resulta muy difícil si no sabéis escuchar.

Existe un arte de escuchar. Para escuchar de veras, habría que abandonar o hacer a un lado todos los prejuicios, formulaciones previas y diarias actividades. Cuando os halláis en un estado mental receptivo, las cosas pueden comprenderse con facilidad; cuando vuestra verdadera atención está puesta en algo, escucháis. Desgraciadamente, empero, la mayoría de nosotros escucha a través de un tamiz de resistencia. Nos escudamos en prejuicios religiosos o espirituales, psicológicos o científicos; o en nuestros diarios deseos, preocupaciones y temores. Escuchamos con todo eso por tamiz. De ahí que en realidad escuchemos nuestro propio ruido, nuestro propio sonido, no lo que se dice. Es en extremo difícil hacer a un lado nuestra educación, nuestros prejuicios, nuestras inclinaciones, nuestra resistencia, y, llegando más allá de la expresión verbal, escuchar de modo tal que comprendamos al instante. Esa va a ser una de nuestras dificultades.

Si, durante esta disertación, algo de lo que se dice resulta opuesto a vuestro modo de pensar y a vuestra creencia, escuchad; nada más; no resistáis. Podréis tener razón, y yo podré estar equivocado; pero escuchando y considerando esto juntos, vamos a descubrir qué es la verdad. La verdad no puede dárosla nadie. Tenéis que descubrirla; y, para descubrir, es preciso que haya un estado mental en el que exista la percepción directa. No hay percepción directa cuando hay una resistencia, un resguardo, una protección.

La comprensión llega dándose uno cuenta de lo que es. Saber exactamente lo que es, lo real, lo efectivo, sin interpretarlo, sin condenarlo ni justificarlo, es, por cierto, el comienzo de la sabiduría. Sólo cuando empezamos a interpretar, a traducir de acuerdo con nuestro “condicionamiento”, a nuestro prejuicio pasamos por alto la verdad. Ello, al fin y al cabo, es como la investigación.
Saber lo que una cosa es, lo que ella es exactamente, requiere investigación; no podéis traducirla conforme con vuestros estados de ánimo.

De un modo análogo, si podemos mirar, observar, escuchar, darnos cuenta de lo que es, exactamente, entonces el problema está resuelto. Y eso es lo que procuramos hacer en todas estas disertaciones. Voy a señalaros lo que es, y no a traducirlo caprichosamente; y tampoco vosotros deberíais traducirlo o interpretarlo conforme con vuestro trasfondo o educación.

¿No es posible, entonces, darse cuenta de toda cosa tal como ella es? Partiendo de ahí, ‑ciertamente, puede haber comprensión. Reconocer, darse cuenta, descubrir lo que es, pone fin a la lucha. Si yo sé que soy mentiroso, ese es un hecho que reconozco, la lucha ha terminado. Reconocer, darse cuenta de lo que uno es, representa ya el comienzo de la sabiduría, el comienzo de la comprensión que os libra del tiempo. Introducir el factor tiempo ‑no el tiempo en un sentido cronológico sino como medio, como proceso psicológico, proceso de la mente- es destructivo y crea confusión.

Podemos, pues, tener comprensión de lo que es, cuando lo reconocemos sin condenación, sin justificación, sin identificación. Saber que uno se halla en cierta condición, en cierto estado, es de por sí un proceso de liberación; pero un hombre que no se da cuenta de su condición, de su lucha, trata de ser otra cosa que lo que él es, lo cual produce hábito. Tengamos presente, entonces, que deseamos examinar lo que es, observar y captar exactamente qué es lo existente, sin tendencia alguna, sin darle una interpretación.